¿Alguien lo dudaba? 6-1 y a cuartos de Champions.
El Barcelona está en cuartos de la Champions tras todo pronóstico tras remontar al Paris Saint-Germain, con un 6-1 histórico que a falta de diez minutos parecía imposible. Nadie había remontado hasta la fecha un 4-0 y lo imposible sucedió.
Con tanto jugador del PSG en su propia área, Luis Suárez sólo necesitó 2 minutos para conseguir el primer gol. Ayudó el desconcierto de la defensa parisina y del meta Trapp.
El PSG tardó media hora en tirar a puerta, pero a los diez minutos apareció la primera polémica. Una centro de Draxler fue cortado por Mascherano con la mano desde el suelo, y el árbitro consideró que fue involuntaria.
También hubo otra polémica en el otro área, mano de Cavani a disparo de Messi de falta directa pero también involuntaria. Las contras de los franceses no llegaban porque apenas eran capaces de dar tres pases seguidos.
Sin embargo, los goles del Barça no llegaban y el segundo llegó de otra carambola. Iniesta se internaba y en una postura forzada probaba el pase, que Kurzawa introdujo en su propia portería en el minuto 40.
La segunda parte empezó con ocho minutos de retraso y tuvieron que ir a buscar a los jugadores del PSG al túnel de vestuarios. ¿Picardía de Emery?
Deniz Aytekin señaló penaltí a instancias de su asistente de fondo, y Messi lo convirtió de forma inapelable, haciendo enloquecer al Camp Nou en el minuto 49.
Cavani reaccionó en la jugada siguiente mandando el primer aviso al palo, y quien avisa no es traidor. El gol parisino llegó en una jugada a balón parado. Un saque largo de falta al corazón del área lo cedió atrás Kurzawa para que Cavani fusilara a la red en el minuto 61. El gol enfrió algo una grada que aun así seguía soñando con la remontada
Parecía muerto el Barça, pero el pentacampeón estaba dispuesto a morir matando y llenando de orgullo a su afición. Neymar hizo el 4-1 de falta directa en el 87' que apenas parecía trascendente.
Pero con el tiempo casi cumplido surgió otra ocasión de penalti para volver a soñar. Marquinhos cometió penalti sobre Suárez y Neymar lo metió haciendo delirar al Camp Nou.
En las últimas jugadas hasta Ter Stegen se animaba a rematar las faltas en un final loco, épico pero dramático. El PSG solo era capaz de defenderse a patadas y en una de esas faltas apareció la bota de Sergi Roberto, salido del banquillo para rematar la mayor azaña del Barça en esta temporada.
Deniz Aytekin señaló penaltí a instancias de su asistente de fondo, y Messi lo convirtió de forma inapelable, haciendo enloquecer al Camp Nou en el minuto 49.
Cavani reaccionó en la jugada siguiente mandando el primer aviso al palo, y quien avisa no es traidor. El gol parisino llegó en una jugada a balón parado. Un saque largo de falta al corazón del área lo cedió atrás Kurzawa para que Cavani fusilara a la red en el minuto 61. El gol enfrió algo una grada que aun así seguía soñando con la remontada
Parecía muerto el Barça, pero el pentacampeón estaba dispuesto a morir matando y llenando de orgullo a su afición. Neymar hizo el 4-1 de falta directa en el 87' que apenas parecía trascendente.
Pero con el tiempo casi cumplido surgió otra ocasión de penalti para volver a soñar. Marquinhos cometió penalti sobre Suárez y Neymar lo metió haciendo delirar al Camp Nou.
En las últimas jugadas hasta Ter Stegen se animaba a rematar las faltas en un final loco, épico pero dramático. El PSG solo era capaz de defenderse a patadas y en una de esas faltas apareció la bota de Sergi Roberto, salido del banquillo para rematar la mayor azaña del Barça en esta temporada.